La cloración de choque es un proceso de tratamiento del agua que implica la adición de una cantidad significativamente mayor de cloro al agua de lo que se suele usar para la desinfección regular. Como sabrás, el cloro es un desinfectante comúnmente utilizado en piscinas para eliminar microorganismos patógenos, como bacterias, virus y otros contaminantes orgánicos.
Teniendo esto en cuenta, la cloración de choque se lleva a cabo por varias razones y con objetivos específicos:
- Eliminar o inactivar rápidamente microorganismos patógenos que pueden estar presentes en el agua, como bacterias coliformes, E. coli y otros agentes infecciosos.
- El cloro en forma de hipoclorito de sodio o calcio es un agente oxidante eficaz que puede descomponer y eliminar materia orgánica presente en el agua, como algas, hongos, aceites y otros compuestos orgánicos.
- Reducción de cloraminas, subproductos de la desinfección del agua que pueden ser irritantes y causar problemas de calidad del agua en piscinas.
- Control de algas y microorganismos en piscinas.
- Preparación para la temporada de piscina. Es una opción que asegura que el agua esté limpia y segura para el baño después de un período de inactividad.
La cantidad de cloro utilizada en un proceso de cloración de choque suele ser significativamente mayor que la dosis diaria de mantenimiento, pero esto varía según la situación y el volumen de agua a tratar. Después de la cloración de choque, es importante esperar a que los niveles de cloro vuelvan a un rango seguro, acuérdate de analizar el agua.
Cuándo se debe realizar la cloración de choque
Antes de comenzar la temporada de piscina, puedes realizar una cloración de choque para asegurarte de que el agua esté limpia y segura.
Por otro lado, también la puedes realizar al final de la temporada de piscina, para prevenir el crecimiento de algas y microorganismos durante el período de inactividad.
Además, si sospechas o confirmas que el agua está contaminada con microorganismos patógenos, como E. coli, o si detectas una alta concentración de cloraminas o materia orgánica, deberás realizar una cloración de choque para eliminar estas amenazas.
Por último, para desinfectar la piscina y el sistema de tratamiento de agua si ha estado expuesto a inundaciones.
Es importante seguir las recomendaciones del fabricante del cloro para asegurar que el proceso se realiza de manera segura y eficaz.
Cómo realizar una cloración de choque de forma efectiva
Realizar una cloración de choque de forma efectiva implica una serie de pasos importantes para garantizar que se eliminen los microorganismos patógenos, se oxiden los contaminantes y se consiga un ambiente seguro y limpio
Para llevar a cabo de manera efectiva la cloración de choque, es fundamental seguir estos pasos:
- Preparación de la piscina: Comienza limpiando con material de limpieza manual básico, tanto la superficie como el fondo, para eliminar cualquier tipo de suciedad o residuos, como hojas, insectos…
- Ajuste del pH: Asegúrate de que esté dentro del rango óptimo (7,2 y 7,6). Si es necesario, realiza ajustes de pH utilizando productos para aumentar o disminuirlo. Un pH incorrecto puede afectar la eficacia del cloro y, por ende, la desinfección.
- Disolución del cloro: Llega el momento de añadir el cloro en la piscina y para ello deberás disolver por completo cloro granulado o en polvo en un cubo con agua y removiéndolo bien. Luego, distribuye esta mezcla uniformemente a lo largo del perímetro de la piscina. Si queda parte del producto, añade más agua, mézclalo nuevamente y viértelo en la piscina. La cantidad de cloro necesaria para una cloración de choque generalmente se encuentra en el rango de 10 a 15 gramos por metro cúbico de agua de la piscina, la cantidad exacta puede encontrarse en las instrucciones del producto.
- Circulación del agua: Es clave que dejes funcionando el sistema de filtración en modo recirculación durante aproximadamente 2-3 horas. Esto permitirá que el cloro se mezcle de manera efectiva con el resto del agua de la piscina y realice su función.
Siguiendo estos pasos, podrás realizar una cloración de choque adecuada para mantener tu piscina en condiciones óptimas y seguras para el baño.
Después de la cloración de choque
Después de llevar a cabo una cloración de choque, es importante realizar un monitoreo para garantizar que el agua de la piscina o el sistema de tratamiento se mantenga en óptimas condiciones.
Realiza pruebas regulares del agua para medir los niveles de cloro residual, pH y alcalinidad. Estas pruebas te ayudarán a asegurarte de que los parámetros del agua estén dentro de los rangos recomendados.
Mantén una rutina de limpieza de la piscina. Esto ayudará a prevenir la acumulación de materia orgánica y la formación de algas.
Mantén el sistema de filtración en funcionamiento durante suficientes horas al día para asegurarte de que el agua circule y se filtre de manera efectiva. Esto es esencial para eliminar partículas y mantener el agua limpia.
Desde Piscinas y Productos te recordamos que el monitoreo y el mantenimiento continuo son esenciales para mantener tu piscina en óptimas condiciones y que no se debe abusar de la cloración de choque.