Cubiertas piscinas

Depende de tu presupuesto y del uso que le des a la piscina. Las manuales son más económicas, mientras que las automáticas ofrecen mayor comodidad y rapidez de uso.

En zonas frías o con lluvias frecuentes, los cerramientos de piscinas rígidos o telescópicos son la mejor opción, ya que protegen el agua de la suciedad y conservan mejor la temperatura.

Sí, existen cubiertas de piscinas a medida diseñadas para adaptarse a formas rectangulares, redondas u otras más complejas.

Las cubiertas de invierno para piscinas aíslan mejor, protegen del hielo y la suciedad. Las de verano suelen ser más ligeras y pensadas para mantener la temperatura del agua.

Las cubiertas de lona para piscinas pueden ofrecer cierta seguridad, pero para una máxima protección se recomienda optar por modelos reforzados con sistemas de fijación sólidos.

El policarbonato, el aluminio y las lonas reforzadas son de los materiales más resistentes, duraderos y con mejor aislamiento.

Algunas cubiertas pueden instalarse fácilmente, pero en el caso de cerramientos o sistemas automáticos es recomendable contar con un instalador especializado.